Análisis de sangre

Mide los niveles de creatinina, un producto de desecho que los riñones eliminan de la sangre. También se puede medir la tasa de filtración glomerular (GFR), que indica qué tan bien filtran los riñones.

Análisis de orina

Busca la presencia de albúmina, una proteína que puede aparecer en la orina cuando los riñones están dañados. También se puede medir la creatinina en la orina.

Pruebas de imagen

Como una ecografía o una tomografía computarizada, que permiten visualizar el tamaño y forma de los riñones y detectar anomalías.

Biopsia de riñón

Consiste en tomar una pequeña muestra de tejido del riñón para analizarla en un microscopio